Camino en vivo

martes, 14 de octubre de 2008

El otro día dije en mi post sobre el nuevo dramón de Javier Fesser que aún no había podido ir a verlo al cine, y pregunté, además, si alguno de mis lectores lo había visto ya. Afirmación y pregunta absurdas, pues resulta que "Camino" se estrena este viernes, 17 de octubre... Un despiste lo tiene cualquiera... En fin, hoy os traigo a Camino en carne y hueso. No sé qué esperar de esta película, la verdad.

3 Comments:

Anónimo said...

Jo, es muy dura la película... pero quiero verla!!!!

Amelie said...

Le echaré un vistazo, pero vamos, no comulgo yo precisamente con las ideas del Opus Dei. Gracias por el comentario, anónimo.

Anónimo said...

He visto Camino, y aparte de otras consideraciones estrictamente cinematográficas, he considerado otro asunto: Fesser manipula y cambia de sentido completamente en esta película la vida de Alexia Gonzalez Barros, una chica que está en proceso de canonización

Lo de Alexia no es una simple "inspiración", porque la película sigue punto por punto los hitos fundamentales de su vida.

Por eso me parece objetivo señalar que Fesser se ha aprovechado de la tragedia familiar de los González Barros y ha maltratado la figura de la madre de Alexia, una madre ya fallecida, buena y comprensiva, que perdió a tres hijos, mostrándola como una fanática.

Además ha cambiando el sentido de la vida del padre -pintándolo como un incrédulo, cuando no lo era- y de la hermana (una mujer con dos carreras universitarias a la que presenta como una tontorrona) sin consultarles nada a los hermanos de Alexia hasta que la película ha estado acabada.

Dan mucha luz sobre este affaire las dos cartas abiertas que le han enviado a Fesser los hermanos de Alexia en http://www.alexiagb.org

Uno de los hermanos le pregunta a Fesser por qué los sigue maltratando de esa manera.

Es como si hubiera utilizado a ana Frank y la hubiera mostrado como una heroína nazi, denigrando a su familia judía. Con los católicos esto es más fácil.

Me parece interesante señalar esto, porque una película no es solo un resultado cinematográfico; también es un empeño humano que puede hacerse dentro o fuera de los límites de la ética.

Y Fesser se ha situado fuera.